EN LÍNEA.
- We.
- 26 ene 2016
- 3 Min. de lectura

Imagen:Instagram @Queboletaoficial
Es normal que tengamos días en los que no queremos hablar con nadie; días en los que nos queremos relajar, olvidar un momento el mundo y las situaciones que nos rodea. Todo eso es completamente normal y nadie nos puede quitar ese derecho, pero, existen cosas que van más allá.
Supongamos algo, en las situaciones amorosas o de cualquier otro tipo nos invaden ciertas preguntas y cuyas respuestas no nos han “llenado” o incluso, no tenemos respuesta por lo menos para ambas. Cuando dos personas empiezan a hablar y llegan al punto de hablar todos los días, a cualquier hora, sin importar nada más pero por cosas de la vida uno de los dos deja de ser tan frecuente como antes; entonces, es aquí cuando (y es duro de aceptar) muy posiblemente y estamos casi seguras en ser nosotras, las mujeres, las que empezamos a notar algo. No nos interesa en este momento si es algo bueno, si es algo malo, eso no nos interesa en este momento.
En este punto nos preguntamos internamente ¿En qué momentos esta persona nos empezó a importar? Cuando supuestamente era algo muy casual. Créanos, nosotras nos preguntamos eso muy seguido. Ese momento llegó, cuando no sabes de nada de la otra persona por un par de minutos o un par de horas ¿Le escribo?... a decir verdad, ese “En Línea” de Whatsapp causa desesperación o no se sabe que es peor, que te dejen en gris o en azul.
Bueno sí, curiosamente estas en Whatsapp y entras a esa conversación “sin querer” listo, ese “En Línea” aparece ¿Qué hacemos? ¿Se supone que le escriba? ¿Espero a que me escriba? El orgullo gana y abandonas la conversación y con mayor ganas si ya le habías escrito algo. Si no quiere hablar ¡comprenda! Algo debe haberle pasado o recuerde lo que hablamos en el primer párrafo. Pero que sucede cuando la persona se pierde por, no sé ¿Cuatro días? ¿Una semana?
Nosotras conocemos a algunos hombres que dicen que van a salir y que en el lugar donde van a estar la señal no llega, pero les escribes y mágicamente les llega el mensaje, o simplemente te metes en ese perfil solo porque quieres ver a esa persona y por obra de Dios esta Online. Nosotras sabemos que no somos el Ombligo del mundo, y no tenemos una relación con esa persona, pero Ajá, si no tienen ganas de hablar con esa persona pues simple, dile que te sientes mal o que quieres tener tiempo para ti o nosotras que sabemos, pero no le digan a uno que van a salir porque ERDA! Eso sí, vaya uno a reclamarles y decirles que mejor dejemos las cosas así, que para nosotras no matarnos la cabeza y que la relación quede en buenos términos es mejor ser amigos, pero no, ellos dicen que por favor no los dejes, que lo único que no tenían era tiempo, que el celular se descargó (cuando más de una vez se le vio Online).
Pero bueno hay que ver como terminan las cosas, pero una cosa sí les decimos: Hombres, las mujeres nos damos cuenta de todo, quiéranlo o no, la verdad siempre va llegar a nuestras manos; así estén en China, Rusia, España, Venezuela, Argentina y Colombia, la verdad va llegar a nuestras manos.
¡Un simple “Quiero ser tu amigo y estar bien contigo” duele por unos cuantos días, pero pensar en que les pasa algo y más con nosotras dura mucho más!
Para terminar, unas simples preguntas: ¿La otra persona se ha de preocupar tanto cuando no respondemos? ¿Soy la única que me preocupo por eso? ¿A ellos le da igual? ¿Nos estamos volviendo locas? ¡Respuesta señores, respuestas!
Nos leemos luego,
We.
Comments